miércoles, 8 de junio de 2011

Permettez-moi


Quiero encender el fuego de tu amor,
que la temperatura de la relación caliente nuestros cuerpos,
que mis manos te digan cómo hablar,
que tu piel se vuelva una con la mía al primer intento.

Déjame unir tu cuerpo con mi cuerpo,
ser el hombre que cumpla tus deseos,
que al mirar mis ojos te des cuenta
que muero si no soy el culpable de tus pensamientos.

Quiero ser el suspiro de tu boca,
decirte bajito lo que siento,
que un beso diga más que mil besos,
que uno de mis abrazos sea tu único anhelo.

Déjame beber el agua de tus deseos
que tus sueños conmigo no sean solo sueños
que cierres los ojos y puedas verme
y que los abras y sueñes con tenerme. 

Déjame crearte un universo,
de momentos únicos y verdaderos,
que encuentres en mi lo que siempre has buscado
que encuentres en mi amor sincero.

Mais permettez-moi


miércoles, 1 de junio de 2011

¿Acaso no lo ves?




Las horas me van consumiendo. No puedo evitar tomarte una vez más como excusa para escribir y es imposible sobreponerme a este sentimiento que tengo desde el día que me perdí mirando tus ojos por primera vez.

Hay poca distancia entre la amistad y algo más que eso. Es complejo el ir y venir de emociones entre nuestra relación y lo poco que tenemos de ella… es enfermizo el miedo a no saber de ti, pero es más enfermizo esperar a saber cómo te encuentras. No quiero dejarte.

Supongo el destino con sus caminos te trajo a mi vida por alguna razón y si tengo que esperar a ver cuál es, estoy dispuesto a olvidar esas horas que me consumen mientras sucede.
...Minuto a minuto, hasta el día en el que caminemos juntos de la mano, yo, contigo, con la única persona de la que en verdad me he enamorado de sus ojos.

La impaciencia aumenta, el desespero me distorsiona el camino y no logro ver bien cuál es. Pensarte me hace daño, esperarte me lastima y más si lo tengo que hacer por años. Toma una decisión, es ahora o nunca. ¿Acaso no lo ves?

De mi cuerpo queriendo fundirse con el tuyo en una sola alma.