lunes, 2 de enero de 2012

3 minutos 51 segundos

3

 “Te amo mi amor, cuídate mucho. Te llamaré cuando pueda” Esas fueron tus palabras desde el aeropuerto, justo antes de abordar el avión; y no pasaron más de 5 minutos para que yo remojara las ganas que tengo de verte en el café que tomaba y comenzara a contarlo todo.

4 minutos 13 segundos duro esa última llamada, y  caminé 15 pasos desde la entrada de mi casa hasta mi cuarto lentamente mientras que te decía todo lo que podía para despedirme... 10 son los días que dura tu viaje y 4 son los hijos que te dije que quería tener, ojala hubieses visto como abriste los ojos la primera vez que escuchaste eso... 6 letras tiene tu nombre y es justo la misma cantidad que tiene el mío y es casi la mitad de los cigarrillos que fumaste el día que nos conocimos. 3 minutos con 51 segundos es lo que dura toda la canción ‘Verte Reír’ y así podría con todas las canciones de Daniel Niño, solo la duración, aun no puedo con partituras ni ritmos… ¿Ves? Comencé a contarlo todo como si eso me ayudara a adelantar el tiempo y que no se me haga tan largo como hasta ahora ha sido.

Sé que me llevas unos años y aunque no me importa cuántos podría decir cuantos meses, días y horas hay de distancia entre los dos, así como podría decir lo mismo del tiempo que lleva tu viaje. Casi como si mi mente fuera un reloj en reversa tengo escrito muy adentro cuanto me queda de espera para volver a verte.

Me gusta pensar que con ese tiempo que me llevas de ventaja te es más fácil tomar mi mano y mostrarme el mundo; y ahora en este viaje, esas calles que conoces, esos caminos que recorres y esos lugares que quedan en tu memoria también llegaran el momento en el que me los muestres. No imagino una forma más linda de descubrir el mundo que guiado por tu experiencia, casi como si yo fuera un rey y tú toda una tripulación de expedicionarios que van a reconocer el lugar antes de que yo vaya. Me gusta ver la alegría en tus ojos cuando quieres mostrarme algo que te encanta y que yo todavía no conozco. Tú y yo somos también esos lugares en los que hemos estado y todos esos en los que vamos a estar.

Esta es otra forma para decirte que te extraño, que no pasa un solo momento del día sin que yo te piense o hable de ti y que casi mecánicamente reviso mi celular cada que puedo buscando encontrar un mensaje tuyo. Y aunque paso todo el día contando todo, también me cuento a mi mismo que ya casi voy a verte, no me preguntes porqué ando haciendo todo eso o porqué tengo tantas ganas de verte, o porqué me enamoré de ti. Te tengo 4921 razones para responderte justo como las letras de este texto y además ya solo faltan 3 minutos para las 12.



Te amo desde mis sueños hasta los tuyos, desde lo que toco hasta lo que no imaginas.